OCTUBRE 14: Beato Honorato de Biala

Beato Honorato de Biala. Sacerdote de la Primera Orden (1829•1916).

Fundador de Congregaciones religiosas. Beatificado por Juan Pablo II el 16 de octubre de 1988. Venceslao Kozminski nació el 16 de octubre de 1829, hijo de Esteban y Alejandra Kahl, en Biala Podlaska, en Polonia.

De su familia, ferviente en la fe, recibió una sólida educación católica que acrecentó poco a poco durante los estudios que culminaron con la láurea en arquitectura. Mientras frecuentaba la Academia de Bellas Artes, hacia los 17 años de edad, le sobrevino una fuerte crisis de fe, agravada por la campaña anticatólica del gobierno de entonces. sospechoso de participar en un cumploot político, fue arrestado, y en la cárcel se acrecentó aun más la crisis al contraer tifo y por el temor a ser condenado a muerte, de modo que se declaró blasfemo y ateo.

Reconocido inocente y superada la crisis religiosa y recuperada también la salud, decidió cambiar radicalmente de vida y se hizo Capuchino en 1848. Entró al noviciado de los Capuchinos, en Lubarttow, y, hechos en Lublin los estudios de filosofía y teología, se trasladó a Varsovia, donde el 27 de diciembre de 1855 fue ordenado sacerdote con el nombre de padre Honorato de Biala. En Varsovia inició de inmediato el ministerio de la predicación y el de la dirección espiritual, tuvo diversos cargos dentro de la Orden y al mismo tiempo iba a las escuelas, colegios, y pensionados femeninos para las lecciones de religión. En especial se hizo cargo de la Asociación del Santo Rosario y de la Tercera Orden Franciscana. Cuando el gobierno, después de las insurrecciones de 1863-64 sup’rimió las Ordenes religiosas, fue relegado hasta 1892 en el convento de Zakrocyun, vigilado siempre por la policía y sin poder salir, de modo que se dedicó a la oración, a las confesiones y a escuchar a los muchísimos fieles que acudían a él con sus problemas de conciencia. Al mismo tiempo, en calidad de comisario general de la Provincia capuchina, desarrolló una intensa actividad ministerial a menudo contraviniendo las leyes zaristas de persecución contra numerosos conventos.

Aún hoy impresiona la enorme cantidad de trabajo apostólico realizado por Honorato, a pesar de las restricciones impuestas por el régimen. Pero el principal carisma de Honorato se ve sobre todo en la fundación de asociaciones y congregaciones religiosas. Valiéndose del confesionario y la correspondencia, de 1874 a 1896 fundó 26 asociaciones piadosas, de las cuales surgieron numerosas Congregaciones. Hoy existen 16, de ellas 3 con hábito religioso y 14 sin él, 2 masculinas y 12 femeninas; puede considerarse precursor de los institutos seculares. De esta manera contribuyó grandemente a la supervivencia de la fe en Polonia. Además de ser renombrado predicador e iluminado director espiritual, fue un escritor fecundísimo para hacer conocer a la gente el amor de Dios, como escribió en su “Manual Espiritual”. En 1892 fue relegado en el convento de Nowa-Miaste, donde permaneció hasta su muerte. Fue verdaderamente hijo de San Francisco en la forma de ver y vivir el amor de Dios en Cristo y en el sentir y vivir el ministerio de la Iglesia.

En 1906 organizó una peregrinación nacional al santuario mariano de Czestochowa, en la cual participaron más de medio millón de personas. En 1908 después de la reorganización de sus Congregaciones decidida por la Conferencia Episcopal, fue removido de la dirección general de las mismas, y él se atuvo dócilmente a los mandatos de las autoridades superiores, conservando sólo la dirección espiritual, de sacerdote y de confesor. El 16 de diciembre de 1916, a la venerable edad de 87 años, moría Honorato Kozminski. En el testamento había expresado el deseo de ocultarse “en las Llagas de Jesús”, y de “entregar el alma al Creador con la misma disposición con que El entregó su espíritu en las manos de su Padre”.